Una parte muy importante de la Medicina Tradicional China es la Dietética, que se considera un recurso terapéutico de primer orden.
En ella, más que la composición química de los alimentos (vitaminas, minerales, etc) se tiene en cuenta su naturaleza (fría, fresca, caliente, etc), su sabor (dulce, salado, picante, etc) y, muy importante, si tienen o no tienen “chi”, que se traduce por energía vital.
Así, un alimento envasado, congelado o muy procesado, para esta medicina carece de chi y se considera que está “muerto”. En cambio, una fruta que acabamos de coger de un árbol o una verdura que hace poco estaba aún en la tierra, antes de ser consumida, está cargada de esta energía vital, que los chinos denominaron “chi”.
De esta forma, por poner un ejemplo, un guisante enlatado puede tener la misma cantidad de vitaminas, minerales o proteínas que otro que acabamos de coger de un huerto, solo que para la medicina china, el primero carece de energía vital y el segundo no. Para reflexionar…